CONTINUAMOS CON NUESTRO CAMINO
En esta ocasión, nos desplazamos a la propia pista de Galapagar. Los vikingos disputábamos un nuevo partido como locales, ante nuestros rivales y conocidos, Bisontes de Alcalá. Pese a haber jugado contra ellos en la primera vuelta, no nos podíamos confiar en esta tercera jornada de la fase de ascenso.
Una vez tocado el cuerno, comenzaban las salidas y ataques de cada equipo. Al comienzo del encuentro, faltaba algún vikingo por llegar, pero eso no nos iba a impedir abrir el marcador gracias al tanto de Pablo Casado. Pasados ocho minutos desde el inicio y con un 2-0 a favor, llegó ese mágico momento que todos estábamos esperando, Almudena se iniciaba como goleadora tras muchos partidos de esfuerzo y dedicación por alzarse con este triunfo personal, que para uno mismo sabe a gloria (como un buen trago de Hidromiel al final del partido). Durante esta primera parte se sucedieron diferentes jugadas en las que pecamos de confianza en lo que a cambios se refiere. Una falta de coordinación en el banquillo, propinaba un ataque determinante para anotar el primer gol de los Bisontes.
Durante el segundo tiempo, la coordinación de los jugadores sobre el terreno fue aumentando, viéndose reflejado en la mejora de las jugadas en equipo y un mayor número de disparos. En este caso, se llegaron a disparar hasta un total de 55 veces de las cuales entraron 10 (y eso que el portero de Bisontes hizo todo lo que pudo y más, para que no fuésemos capaces de anotar), dejando un resultado a favor de 10-2.
Este fin de semana nos deja una gran jornada de reflexión. Nos vamos muy contentos por esta victoria en casa y dispondremos de unas semanas de descanso para reponer fuerzas y poner las miradas en la próxima fecha del calendario (o, mejor dicho, en la batalla que tendrá lugar el próximo ciclo lunar). ¡POR ODIN!